Este Blog pretende ser un instrumento al servicio de la Parroquia, para información y formación de los visitantes
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lunes, 28 de septiembre de 2015
sábado, 26 de septiembre de 2015
CELEBRACIÓN DE LAS BODAS DE ORO DE ORDENACIÓN SACERDOTAL DEL PÁRROCO D.JUAN GARCÍA INZA
Tendrá lugar este domingo, día 27, en la Misa de 11,30 . Están todos invitados a participar de la Acción de Gracias por este acontecimiento. Pediremos especialmente por D. Juan y por todos los sacerdotes y vocaciones al sacerdocio
El día 25 de septiembre recuerdo el momento en que el Obispo me ungió las manos, y mi madre las ató con una cinta de seda, que aún conservo. Es un gesto de gran valor teológico. Las manos del sacerdote son ungidas para poder tomar el pan que se ha de convertir en Cuerpo de Cristo, para dar la absolución en el sacramento de la Penitencia, para administrar el Sacramento del Bautismo, la Confirmación, la Unción de enfermos, y bendecir el Matrimonio.
Juan García Inza
juan.garciainza@gamil.com
El día 25 de septiembre recuerdo el momento en que el Obispo me ungió las manos, y mi madre las ató con una cinta de seda, que aún conservo. Es un gesto de gran valor teológico. Las manos del sacerdote son ungidas para poder tomar el pan que se ha de convertir en Cuerpo de Cristo, para dar la absolución en el sacramento de la Penitencia, para administrar el Sacramento del Bautismo, la Confirmación, la Unción de enfermos, y bendecir el Matrimonio.
Esta mañana me miraba las manos y rogaba a Dios que no perdiera nunca la Unción. Que mis manos estén siempre dispuestas para trasmitir la Gracia que El nos regala. Somos hombres con manos ungidas. Antiguamente a los sacerdotes se les besaba las manos al saludarlos. Ahora ha quedado como único rito al terminar la celebración de la Primera Misa, y en las Bodas de Plata y Oro.
Lo que se me ocurre decir en estos momentos es que ahí tenéis mis manos para que Dios pueda llegar a vosotros. Y que valoremos siempre las manos ungidas de todo sacerdote. El Señor está actuando a través de ellas.
Recuerdo una homilía de Benedicto XVI centrada en las manos ungidas del sacerdote. Traigo aquí algunos de sus bellos párrafos:
Por tanto, reflexionemos nuevamente en los signos con los que se nos ha entregado el sacramento. En el centro está el gesto antiquísimo de la imposición de las manos, con el que él tomó posesión de mí diciéndome: «Tú me perteneces». Pero de este modo nos ha dicho también: «Tú estás bajo la protección de mis manos. Tú estás bajo la protección de mi corazón. Tú estás protegido bajo el hueco de mis manos y te encuentras en la inmensidad de mi amor. Estás en el espacio de mis manos; dame las tuyas».
Recordamos, además, que nuestras manos han quedado ungidas por el óleo, que es el signo del Espíritu Santo y de su fuerza. ¿Por qué las manos? La mano del hombre es el instrumento de su acción, es el símbolo de su capacidad para afrontar el mundo, para «tomarlo en la mano». El Señor nos ha impuesto las manos y ahora quiere nuestras manos para que, en el mundo, seamos las suyas. Quiere que dejen de ser instrumentos que toman las cosas, los hombres, el mundo para nosotros mismos, para someterlos a nuestra posesión, y que por el contrario transmitan su toque divino, poniéndose al servicio de su amor. Quiere que sean instrumento de servicio y por tanto de expresión de la misión de toda la persona que se convierte en su garante y que le transmite a los hombres.
Si las manos del hombre representan simbólicamente sus facultades y, más en general, la técnica como poder capaz de dominar el mundo, entonces las manos ungidas tienen que ser un signo de su capacidad para dar, de la creatividad para plasmar el mundo con amor y para esto tenemos necesidad sin duda del Espíritu Santo. En el Antiguo Testamento, la unción es signo de asumir un servicio: el rey, el profeta, el sacerdote hace y entrega mucho más que aquello que procede de sí mismo. En cierto sentido, queda expropiado de sí en virtud de un servicio, en el que se pone a disposición de uno más grande que él. Si Jesús se presenta hoy en el Evangelio como el Ungido de Dios, el Cristo, entonces esto quiere decir precisamente que actúa por misión del Padre y en unidad con el Espíritu Santo y que, de este modo, entrega al mundo una nueva realeza, un nuevo sacerdocio, una nueva manera de ser profeta, que no se busca a sí mismo, sino que vive por aquel por quien el mundo ha sido creado. Pongamos hoy nuestras manos nuevamente a su disposición y pidámosle que nos lleve siempre de la mano y que nos guíe.
El Señor ha puesto su mano sobre nosotros. El significado de este gesto lo expresó con las palabras: «No os llamo ya siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su amo; a vosotros os he llamado amigos, porque todo lo que he oído a mi Padre os lo he dado a conocer» (Juan 15, 15). No os llamo ya siervos, sino amigos: en estas palabras se podría ver ya la institución del sacerdocio. El Señor nos hace amigos suyos: nos confía todo; se confía a sí mismo para que podamos hablar con su «yo» «in persona Christi capitis». ¡Qué confianza! Verdaderamente se ha puesto en nuestras manos. Los signos esenciales de la ordenación sacerdotal son en el fondo manifestaciones de esa palabra: la imposición de las manos; la entrega del libro –de su palabra que nos confía–, la entrega del cáliz con el que nos trasmite su misterio más profundo y personal. De todo esto forma parte también el poder de absolver: nos hace partícipes de su conciencia sobre la miseria del pecado y la oscuridad del mundo y pone en nuestras manos la llave para volver a abrir la puerta hacia la casa del Padre…
No os llamo ya siervos, sino amigos. El corazón del sacerdocio consiste en ser amigos de Jesucristo. Sólo así podemos hablar verdaderamente «in persona Christi», a pesar de que nuestra lejanía interior de Cristo no puede comprometer la validez del Sacramento. Ser amigo de Jesús, ser sacerdote, significa ser hombre de oración. De este modo le reconocemos y salimos de la ignorancia de los siervos. De este modo aprendemos a vivir, a sufrir y a actuar con él y por él. La amistad con Jesús es siempre por antonomasia amistad con los suyos. Sólo podemos ser amigos de Jesús en la comunión con Cristo total, con la cabeza y el cuerpo; en la lozana vid de la Iglesia animada por su Señor. Sólo en ella la Sagrada Escritura es, gracias al Señor, Palabra viva y actual. Sin el sujeto viviente de la Iglesia que abarca las edades, la Biblia se fragmenta en escritos que con frecuencia son heterogéneos y se convierte en un libro del pasado. Es elocuente en el presente sólo allí donde está la «Presencia», donde Cristo sigue haciéndose nuestro contemporáneo: en el cuerpo de su Iglesia.
Ser sacerdote significa ser amigo de Jesucristo, y serlo cada vez más con toda nuestra existencia. El mundo tiene necesidad de Dios, no de un dios cualquiera, sino del Dios de Jesucristo, del Dios que se hizo carne y sangre, que nos amó hasta morir por nosotros, que resucitó y creó en sí mismo un espacio para el hombre. Este Dios tiene que vivir en nosotros y nosotros en él. Esta es nuestra llamada sacerdotal: sólo así nuestra acción de sacerdotes puede dar fruto.
Quisiera concluir esta homilía con una palabra de Andrea Santoro, ese sacerdote de la diócesis de Roma que fue asesinado en Trebisonda mientras rezaba; el cardenal Cè nos la comunicó durante los ejercicios espirituales. La frase dice: «Estoy aquí para vivir entre esta gente y permitir que Jesús lo haga prestándole mi carne… Sólo somos capaces de salvación ofreciendo la propia carne. Hay que cargar con el mal del mundo y compartir el dolor, absorbiéndolo en la propia carne hasta el final, como hizo Jesús». Jesús asumió nuestra carne. Démosle nosotros la nuestra, para que pueda venir al mundo y transformarlo. ¡Amén!
Juan García Inza
juan.garciainza@gamil.com
HOJA PARROQUIAL DE LOS RECTORES
HOJA PARROQUIAL DE LOS RECTORES
Domingo
XXVI del t.o. ciclo B Escritura: Números: 11, 25-29; Santiago 5, 1-6;
Marcos 9, 37-42.46-47 |
EVANGELIO
En aquel tiempo dijo Juan a Jesús:
Maestro, hemos visto a uno que echaba demonios en tu nombre, y se lo
hemos querido impedir, porque no es de los nuestros.
Jesús respondió: -No se lo impidáis, porque uno que hace milagros en mi
nombre no puede luego hablar mal de mí. El que no está contra nosotros está a
favor nuestro. El que os dé de beber un vaso de agua porque seguís al Mesías,
os aseguro que no se quedará sin
recompensa. Al que escandalice a uno de estos
pequeñuelos que creen, más le valdría que le encajasen en el cuello una piedra
de molino y lo echasen al mar. Si tu mano te hace caer, córtatela: más te vale
entrar manco en la vida que ir con las dos manos al abismo, al fuego que no se
apaga. Y si tu pie te hace caer, córtatelo: más te vale entrar cojo en la vida
que ser echado con los dos pies al abismo. Y si tu ojo te hace caer, sácatelo;
más te vale entrar tuerto en el Reino de Dios que ser echado al abismo con los
dos ojos, donde el gusano no muere y el fuego no se apaga.
COMENTARIO
Érase un rey que cada día dedicaba un
tiempo a escuchar las peticiones de sus súbditos. Y cada día un hombre bueno,
vestido de mendigo, se acercaba al rey y le ofrecía una fruta muy madura. El
rey la recibía y se la entregaba al tesorero que estaba detrás del trono.
Un día, al cabo de muchos años de repetirse este gesto, un mono del palacio
vino a sentarse en un brazo del sillón del trono. El mendigo acababa de ofrecer
al rey su fruta y éste se la dio al mono. Cuando éste la mordió una joya de mucho
valor cayó al suelo.
El rey, maravillado, le preguntó al tesorero qué había sido de las otras.
El tesorero no respondió porque había tirado las frutas por la ventana a un
patio interior.
El tesorero corrió al patio y allí, en el suelo, encontró las frutas ya
podridas y un montón de joyas preciosas.
Un mono –gracias a un mono- que se atrevió a morder la fruta se descubrió
el tesoro que le regalaba, cada día, un hombre bueno.
Hermoso cuento que vamos a descifrar a la luz del evangelio.
El hombre bueno, vestido de mendigo, es Jesús que nos ofrece día tras día la fruta del amor.
Jesús es el hombre
bueno que, vestido con nuestra carne, nuestros sufrimientos y nuestra
debilidad, nos ofrece la fruta del perdón, del servicio y de su vida entera
para hacernos nuevos y felices.
Nosotros somos el tesorero, los que recibimos del rey el regalo de la
fruta. Y como el tesorero del cuento, despreciamos el regalo que se nos antoja
pequeño e insignificante y lo botamos por la ventana.
¿Qué hacemos nosotros con el regalo de la Palabra de Dios, con el regalo de
su mesa y con el regalo de su sangre?
¿Qué hacemos con los que no están a favor nuestro, con los niños, con
nuestros pies y con nuestros ojos?
El evangelio es siempre una llamada a la responsabilidad. Somos responsables de nuestras vidas pero
también lo somos de todo lo que nos rodea. Somos libres pero también
responsables. Tenemos derechos y también obligaciones. Y como católicos más
responsables, más obligaciones porque más conscientes de lo mucho que hemos
recibido del Señor Jesús.
¿Y el mono del cuento? El mono es el que sin darse cuenta, muerde la
fruta, la saborea, acepta ingenuamente el regalo y revela el secreto que
encierra: la joya de la salvación.
¿Quién es el mono aquí en la comunidad?
Todos los que aceptan el regalo del Señor y lo hacen suyo.
AVISOS
La
semana próxima, lunes, martes y miércoles, pueden ser matriculados los niños de
primero y de segundo de Comunión. De 6 a 7 de la tarde por la entrada del
Paseo. Es imprescindible presentar la Partida de Bautismo de los niños que no
lo hicieran el año pasado, y no hayan sido bautizados en esta parroquia.
Los
días 5 y 6 de Octubre iniciamos el Curso de Catequesis en los días y hora
indicados.
viernes, 18 de septiembre de 2015
HOJA PARROQUIAL DE LOS RECTORES
Hoja parroquial de los rectores
20 de septiembre 2015
Domingo XXV del t.o. Escritura: Sabiduría 2,
17-20; Santiago 3, 16-4, 3;
Marcos 9, 29-36 |
EVANGELIO
En aquel tiempo instruía Jesús a sus discípulos. Les
decía: -El Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres, y lo
matarán; y
después de muerto, a los tres días resucitará.
Pero no entendían aquello, y les daba miedo preguntarle.
Llegaron a Cafarnaúm, y, una vez en casa les preguntó: ¿De qué discutíais en el
camino?
Ellos
no contestaron, pues por el camino habían discutido quién era el más
importante. Jesús se sentó, llamó a los Doce y les dijo: -Quien quiera ser el
primero, que sea el último de todos y el servidor de todos. Y acercando a un
niño, lo puso en medio de ellos, lo abrazó y les dijo: -El que acoge a un niño
como éste en mi nombre, me acoge a mí; y el que me acoge a mí, no me acoge a
mí, sino al que me ha enviado.
COMENTARIO
¿A QUÉ SABE DIOS?
Un niño de cuatro años a los pocos días de nacer su nuevo
hermanito pidió a sus padres que le dejaran estar a solas con el baby. Los
padres, preocupados por su insistencia, pensaron que tenía celos y podía
hacerle daño y le dijeron que no. Tanto insistió el niño que terminaron por
dejarle. El niño entró en la habitación, se acercó a su hermanito, juntó
su mejilla con la de su hermanito y le preguntó: Baby, dime ¿a qué sabe Dios?
Yo ya he empezado a olvidarlo.
Hacerse adulto, crecer, es perder la inocencia, dejar de ser dependiente, olvidar la casa paterna, enterrar el niño que todos llevamos dentro y vivir la vida sin ataduras familiares, sociales y religiosas. Es olvido de Dios. La sociedad actual hace a los niños adultos antes de hora y se olvidan pronto de cómo sabe Dios.
Hacerse adulto, crecer, es perder la inocencia, dejar de ser dependiente, olvidar la casa paterna, enterrar el niño que todos llevamos dentro y vivir la vida sin ataduras familiares, sociales y religiosas. Es olvido de Dios. La sociedad actual hace a los niños adultos antes de hora y se olvidan pronto de cómo sabe Dios.
“El que acoge a un niño como éste en mi nombre me acoge a
mí y el que me acoge a mí acoge al que me envió”. El niño en tiempos de
Jesús era símbolo de lo insignificante, de lo que no cuenta y no era contado.
Acoger a Jesús es acoger al que nunca dejó de ser hijo, al que siempre vivió
en contacto con el Padre.
Acoger a Jesús es acoger al hermano que nos puede decir a
qué sabe Dios y acoger al hermano que nos necesita. Acoger a Jesús es acoger al
primer servidor, al hombre que vivió y vive para los demás. Es acoger al Hijo
del hombre entregado en mano de los hombres que lo crucificaron para resucitar
al tercer día.
Sí, Dios sabe a servicio, a fracaso, a impotencia. Los doce compañeros de Jesús, adultos ambiciosos, no estaban interesados en la catequesis de Jesús. Querían hacer carrera y triunfar. Eso de morir por nada o por los demás no entraba en sus cabezas como tampoco entra en las nuestras. Esos doce hombres llevaban su conversación, la de Jesús no les interesaba, y su preocupación era saber quién se iba a poner el brazalete de capitán del equipo. Hasta le querían quitar la primacía a Jesús, La ambición humana no tiene límites.
¿Cuántas veces la Iglesia, la institución, no ha olvidado
a Jesús y se ha convertido en la protagonista, en el número uno? Peligro de
ayer y de siempre. Según el Cardenal Martini, fallecido, la Iglesia ha envejecido, tiene
templos grandiosos y vacíos, tiene miedo a convertirse y a servir de verdad a
los hombres.
Poema de Gabriela Mistral
Poema de Gabriela Mistral
Toda la
providencia es un anhelo de servir.
Sirve la nube, sirve el viento, sirve el surco.
Donde hay un árbol que plantar, plántalo tú;
Donde hay un error que enmendar, enmiéndalo tú.
Sirve la nube, sirve el viento, sirve el surco.
Donde hay un árbol que plantar, plántalo tú;
Donde hay un error que enmendar, enmiéndalo tú.
Sé el que
apartó del camino la piedra,
El odio de los corazones y las dificultades del problema.
Hay la alegría de ser sano y la de ser justo, pero hay sobre todo, la inmensa, la hermosa alegría de servir.
Qué triste sería el mundo si todo él estuviera hecho; si no hubiera un rosal que plantar, una empresa que emprender.
El odio de los corazones y las dificultades del problema.
Hay la alegría de ser sano y la de ser justo, pero hay sobre todo, la inmensa, la hermosa alegría de servir.
Qué triste sería el mundo si todo él estuviera hecho; si no hubiera un rosal que plantar, una empresa que emprender.
No caigas
en el error de que sólo se hacen méritos con los grandes trabajos; hay pequeños
servicios: arreglar una mesa, ordenar unos libros, peinar una niña.
Aquél el que critica, éste el que destruye; sé tú el que sirve.
El servir no es una faena de seres inferiores. Dios que es el fruto y la luz, sirve. Pudiera llamarse…! el que sirve!
Y tiene sus ojos en nuestras manos y nos pregunta cada día: ¿Serviste hoy?
Aquél el que critica, éste el que destruye; sé tú el que sirve.
El servir no es una faena de seres inferiores. Dios que es el fruto y la luz, sirve. Pudiera llamarse…! el que sirve!
Y tiene sus ojos en nuestras manos y nos pregunta cada día: ¿Serviste hoy?
¿A quién?
¿Al árbol? ¿A tu hermana? ¿A tu madre?
¿Al árbol? ¿A tu hermana? ¿A tu madre?
ESTA SEMANA
Miércoles: CENACULO DE LA DIVINA MISERICORDIA A LAS 20,30
Próximo Domingo: MISA DE ACCIÓN DE GRACIAS POR LOS 50 AÑOS DE
SACERDOCIO DE D. JUAN. A las 11,30 de la mañana. Después convivencia parroquial
en los salones para todo el que lo desee.
Durante ella tendrá lugar una conferencia sobre la historia de EL SANTO CÁLIZ DE JESÚS CONSERVADO EN LA CATEDRAL DE VALENCIA. Os esperamos.
sábado, 12 de septiembre de 2015
DOMINGO XXIV DEL TIEMPO ORDINARIO
Hoja parroquial de los rectores
Domingo
XXIV del T.O. Escritura: Isaías 50, 5-10; Santiago 2, 14-18; Marcos 8, 27-35
|
EVANGELIO
En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos se
dirigieron a la aldea de Cesarea de Filipo; por el camino preguntó a sus
discípulos: -¿Quién dice la gente que soy
yo?
Ellos le contestaron: -Unos, Juan
Bautista; otros Elías, y otros, uno de los profetas.
Él les preguntó: -Y vosotros, ¿quién decís
que soy?
Pedro le contestó: -Tú eres el Mesías.
Él les prohibió terminantemente, decírselo
a nadie.
Y empezó a instruirlos: El Hijo del
hombre tiene que padecer mucho, tiene que ser condenado por los senadores,
sumos sacerdotes y letrados, ser ejecutado y resucitar a los tres días.
Se lo explicaba a todos con claridad.
Entonces Pedro se lo llevó a parte y se puso a increparlo. Jesús se volvió, y
de cara a los discípulos increpó a Pedro: -¡Quítate de mi vista, Satanás! Tú
piensas como los hombres, no como Dios.
Después llamó a la gente y a sus
discípulos y les dijo: -El que quiera venirse conmigo, que se niegue a sí
mismo, que cargue con su cruz y me siga. Mirad, el que quiera salvar su vida,
la perderá; pero el que pierda su vida por el Evangelio, la salvará.
COMENTARIO
Un joven llamó al pastor
para decirle que quería hacerse miembro de la parroquia. Pero que no tenía
intención de ir a misa todos los domingos ni asistir a las clases de Biblia ni
ser lector ni visitar a los enfermos ni…
El pastor le alabó el
deseo de hacerse miembro de la parroquia, pero le dijo que la iglesia que
buscaba se encontraba a las afueras de la ciudad. El joven anotó la dirección y
colgó. Cuando llegó a la dirección que el pastor le había dado encontró una
iglesia abandonada y algunos edificios tapiados y listos para ser destruidos.
Cuando Jesús invita a
seguirle, a afiliarse a su iglesia, invita a ponerse en camino, a peregrinar. No
invita a ser sus huéspedes en un hotel maravilloso en el mar Caribe. El evangelio de hoy
es una parada a lo largo del camino con Jesús. En esa conversación Jesús
nos pregunta: ¿Quién dice la gente que soy yo?
Mi madre dice…
Mi padre siempre me
dijo…
Según este libro, según
el periódico…
Repetir lo que los otros
dicen es muy barato. A Jesús no le interesan nuestros conocimientos teológicos.
Se puede ser una enciclopedia y estar vacío. Tú puedes conocer todas las
respuestas que otros han dado, pero no tener tu respuesta. Y como Pedro podemos
dar la verdadera respuesta, pero sin contenido.
"¿Quién decís que
soy?" No, no me digas esas definiciones que aprendiste de pequeño. No es
cuestión de palabras, palabra hablada, sino de la palabra vivida. Una
confesión plena de fe en Jesús se hace sólo con acciones, en tus acciones.
Las palabras expresan
deseos, opiniones, sentimientos…las acciones expresan la verdad de nuestras
vidas, las acciones expresan nuestras convicciones y éstas tienen un precio. "¿Quién decís
que soy?"
No te preocupes si no
sabes contestar. El viaje con Jesús dura toda la vida y a lo largo de este
peregrinar se nos va revelando, poco a poco, el significado de su persona y de
su vida.
AVISOS
FIESTA DE LA EXALTACIÓN DE LA SANTA CRUZ
El día 14 lunes. Pero nosotros la celebramos este domingo. Lo importante es
SER CONSCIENTES DE LA IMPORTANCIA DE LA CRUZ DE CRISTO EN NUESTRA VIDA
CRISTIANA. Si no valoramos LA CRUZ no damos importancia a los que ocurrió en el
Monte Calvario. Por la Cruz fuimos REDIMIDOS DEL PECADO PERSONAL Y DE PUEBLO DE
DIOS. La Cruz es el signo del cristiano. Debemos tenerla presente. Y seguir a
Jesucristo cada uno con su CRUZ. ¿Cuál es la tuya? ¿Cuál es la Cruz de las
personas que conoces?
AL TERMINAR LA MISA DE LA TARDE DE STE DOMINGO TENDREMOS LA PROCESION DEL
SATISIMO CRISTO DEL OLIVO POR LAS CALLES DE LA PARROQUIA. AL FINAL DAREMOS A
BESAR LA RELIQUIA DE LA CRUZ DE CRISTO QUE TENEMOS EN LA PARROQUIA. TIENE UNAS
GRACIAS ESPECIALES.
sábado, 5 de septiembre de 2015
DOMINGO XXIII DEL TIEMPO ORDINARIO
Hoja parroquial de los rectores
Domingo XXIII. Escritura:Isaías 35, 4-7; Santiago 2, 1-5;
Marcos 7, 31-37
|
EVANGELIO
En aquel tiempo, dejando Jesús el
territorio de Tiro, pasó por Sidón, camino del lago de
Galilea, atravesando la Decápolis. Y le presentaron un sordo, que, además,
apenas podía hablar; y le piden que le imponga las manos. Él,
apartándolo de la
gente a un lado, le metió los dedos en los oídos y con la saliva le tocó la
lengua. Y mirando al cielo, suspiró y le dijo: -Effetá ( esto es,
"ábrete")
Y al momento se le abrieron los oídos, se
le soltó la traba de la lengua y hablaba sin dificultad. Él les mandó que no lo
dijeran a nadie; pero cuanto más se lo mandaba, con más insistencia lo
proclamaban ellos. Y en el colmo del asombro decían: -Todo lo ha hecho bien;
hace oír a los sordos y hablar a los mudos.
COMENTARIO
Dicen que al profeta Elías le gustaba pasear por las calles del pueblo disfrazado. Quería observar a la
gente en su salsa, de cerca.
Un día se disfrazó de mendigo, ropas sucias y rotas. Fue a llamar a la
puerta de una gran mansión. Se celebraba una gran fiesta. Cuando lo vio el
dueño sucio y andrajoso, lo despachó con un gran portazo.
Elías se marchó. Volvió más tarde, ahora lujosamente vestido: traje, camisa
de seda, sombrero, bastón con empuñadura de oro. Cuando llamó a la puerta fue
recibido con todos los honores y sentado en la mesa de honor. Todos le miraban
con admiración.
De repente Elías empezó a llenarse los bolsillos de comida y a derramar el
vino por su ropa. La gente sorprendida le preguntó por qué se comportaba así. Elías
contestó: cuando vine como rico me honraron y agasajaron, pero soy la misma
persona. Sólo han cambiado mis vestidos. Ustedes no me recibieron a mí sino a
mis vestidos y mis vestidos tenían que ser alimentados.
Los invitados bajaron la cabeza avergonzados y cuando la levantaron Elías
había desaparecido. En su silla había quedado su bastón con la empuñadura de oro.
¿Les suena esta historia? A mí me recuerda la carta del apóstol Santiago.¿Qué más les recuerda
esta historia y esta lectura? A mí me recuerda mi comportamiento
que, a veces, juzgo por las apariencias y me dejo seducir por lo externo.
¿Les pasa a ustedes también lo mismo? La Palabra de Dios está presente aquí y la
proclamamos para corregir nuestras desviaciones del camino cristiano.
ESTAMOS COMENZANDO EL CURSO
Poco a
poco estamos cogiendo el ritmo normal tras un tiempo de vacaciones veraniegas. En
este mes de septiembre muchas actividades se ponen en marcha en las parroquias,
como en los colegios, trabajos y otras actividades. Lo importante es acordarnos
lo que dice de Jesús el Evangelio de hoy: TODO
LO HIZO BIEN. Esto es lo que debemos
pretender, a pesar de nuestras limitaciones. Y esto es lo que hay que educar en
los niños y jóvenes.
OS DESEO UN FELIZ CURSO, QUE SEGURO QUE NOS OFRECERÁ
COSAS IMPORTANTES.
PARA ESTE MES DE SEPTIEMBRE
TRIDUO AL SANTISIMO CRISTO
DEL OLIVO
Días 11, 12 y 13 a las 19,30
El día 11 a las 20 h. celebraremos un funeral por el
eterno descanso de Juan Collados, gran colaborador de la Parroquia desde sus
inicios. A él le debemos, entre otras muchas cosas, la estructuración del jardín
de la parroquia y la limpieza de las instalaciones. Dedicaba muchas horas a la
Adoración del Santísimo y a la devoción a la Virgen. Su profesión fue la de
minero del carbón en León. De la extrema izquierda y ateísmo, experimentó una
conversión rotunda gracias a la Virgen. Dedicaba tiempo a la atención de presos
en las cárceles de Murcia, a los que instruía en trabajos manuales y en la
doctrina cristiana. Que descanse en Paz.
EL DOMINGO 13 TENDREMOS, AL
TERMINAR LA MISA DE LA TARDE, LA PROCESIÓN
DEL SANTISIMO CRISTO DEL OLIVO POR LA CALLES DE LA URBANIZACIÓN. Todos estamos
invitados a manifestar nuestra FE EN JESUCRISTO PUBLICAMENTE
BODAS DEL ORO SACERDOTALES DE D. JUAN GARCIA INZA
Se celebrará el DOMINGO 27 EN LA MISA DE 11,30. Será
presidida la celebración por el M.I. Sr. Vicario General de la Diócesis. Al
finalizar la Santa Misa tendrá lugar el BESAMANOS del Párroco, como se hizo en
su Ordenación Sacerdotal y en sus Bodas de Plata. Después tendremos una fiesta
familiar.
Ya recordaremos este acontecimiento en domingos
sucesivos.
PEREGRINACION A ROMA CON MOTIVO DEL ENCUENTRO CON EL
PAPA DE LOS SANTUARIOS DEL MUNDO EN EL AÑO JUBILAR DE LA MISERICORDIA. Días
18-22 de Enero. El periodo de reserva de plazas está abierto. Informa en la
Parroquia.
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